top of page
  • Foto del escritorMRA

Maldita culpa.

Me culpa. Y sí, mi mayor miedo se hizo realidad.

Soy la culpable, está enojado, y es por mí.

Mis decisiones le afectan, mis decisiones le duelen.

Puedo con esto, sí que puedo.

Confío en que estará bien, confío en que sanará, confío en su buen corazón que no guardará rencor.

Confío en Dios. Confío en mis decisiones.

Te lo entrego a ti Dios mío, que esta angustia pase, que su dolor cese, que tu Espíritu lo ilumine.

Te lo entrego a Ti.

Libera el control, de lo que no está en mis manos.

Me responsabilizo de lo que sí, y lo acepto, aunque duela.

Un vacío enorme me invade, he lastimado a tantos.

Maldita culpa, siempre logras regresar.


4 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo

No lo soy.

Sola. Frágil. Abandonada. Hay días en que regresa ese sentir a mí. Rompo en llanto. No soy suficiente. No lo hago bien, no sé hacerlo bien. Este vacío en mi pecho se acentúa. Un grito ahogado. Desespe

Carta de amor nunca entregada.

Este año contigo fue un sube y baja de emociones. Te quise soltar tantas veces que perdí la cuenta. Traté de borrarte de mi, pero no pude. Traté de olvidarte, de dejar de pensarte, de no necesitarte;

¿Quién dice?

¿Quien dice qué esta bien y que esta mal? Todos nos equivocamos. Unos más que otros, o unos en más circunstancias más “mal vistas” que otras. ¿Quien dice qué es lo “mal visto”? ¿Por qué satanizamos lo

Publicar: Blog2_Post
bottom of page